La cobra real es la serpiente venenosa más larga del mundo, conocida por su poderoso veneno neurotóxico. Esta serpiente no solo muerde para defenderse, sino que también puede escupir veneno como forma de ataque. Respetada por su majestuosidad pero temida por su peligrosidad, está dotada de un veneno que puede matar a un elefante o 20 personas adultas.